¡Ay, qué poquito queda para Halloween! Y es que aunque sea una fiesta celebrada sobre todo en países anglosajones, ¡¡nosotros también queremos celebrar la noche de brujas!!
Por eso, os traigo un tutorial donde os enseño cómo hacer paso a paso cada uno de estos terroríficos cupcakes de Halloween para que podáis hacerlos en casa e incluso si tenéis niños, ¡a ellos les encantará ayudaros!.
Como ya sabemos, lo que caracteriza a Halloween son los colores naranja, negro y morado y los sabores a calabaza y canela. Pues bien, he reunido todos esos requisitos para hacerlos y es que están ¡buenísimos!. Vamos con la receta:
INGREDIENTES PARA LA MASA:
- 50mL de aceite
- 100gr de azúcar
- 2 huevos
- 100gr de calabaza
- 100gr de harina
- Una cucharadita de levadura química
- Una cucharadita de canela en polvo
- 60mL de leche
INGREDIENTES PARA LA CREMA DE QUESO:
- 75gr de mantequilla sin sal
- 100gr de azúcal glass
- 125gr de queso tipo Philadelphia
PROCEDIMIENTO:
Para empezar, precalentamos el horno a 150ºC (esta es la temperatura buena en mi horno, pero es importante que conozcáis la de vuestro horno, ya que a veces varía).
Mezclamos el aceite junto con el azúcar y añadimos uno a uno los huevos.
Por otro lado, cocemos la calabaza que hemos cortado en trocitos previamente. Cuando la calabaza esté tierna, la escurrimos y la batimos (yo utilicé la minipimer). La dejamos enfriar, y la agregamos a la mezcla.
Lo siguiente es tamizar los ingredientes secos (la harina, la levadura y la canela) y lo incorporamos junto con la leche (de forma alterna).
Preparamos nuestras cápsulas en la bandeja para cupcakes (yo elegí tres colores: naranja, morado y negro porque creo que son los colores que simbolizan a Halloween). Tras 15-20 minutos ya estarán hechos, si no estás seguro, pínchalos con un palillo, si sale limpio es que lo están.
Los dejamos enfriar y nos ponemos con la crema de queso. En un bol bate la mantequilla (a temperatura ambiente) con el azúcar glass (ten cuidado al principio porque el azúcar salta por todos lados, te recomiendo que tapes el bol con un trapo de cocina húmedo hasta que se hayan integrado un poco los ingredientes). Cuando esté bien mezclado, incorpora el queso.
Yo decidí teñir la crema de dos colores así que la dividí y una la teñí de naranja y la otra de verde (con colorantes en pasta).
Cuando nuestros cupcakes estén bien fríos, con una espátula le echamos la crema para que queden planitos y todos por igual. Y a continuación preparé dos mangas según los dos colores. La crema de color naranja la metí en una manga pastelera con una boquilla redonda grande y la crema de color verde la metí en una manga pastelera con una boquilla del número 3 para hacer el efecto de césped (tuve que hacerlo así porque no tenía la boquilla de césped y bueno el efecto es el mismo solo que así se tarda un poco más).
¡Y ya está todo listo! Ahora solo falta ponernos manos a la obra con nuestras decoraciones...
CUPCAKE DE CALABAZA:
Para empezar, cogemos un trocito de fondant lo tintamos de naranja (1) y hacemos una bolita (2). A continuación, con una esteca para fondant hacemos unas rayas apretando un poco (3) y (4).
Lo siguiente es coger otro trocito de fondant y tintarlo de verde (5). Ahora hay que simular la forma con la esteca como podemos ver en las imágenes (6) y (7) y lo pegamos a la calabaza con un poco de agua ayudándonos de un pincel. Por último cogemos el sobrante del fondant verde y hacemos un cilindro muy fino, lo enrrollamos a un palillo y lo dejamos secar para que coja esa forma (8). Después, en un lateral de la calabaza, haremos un pequeño agujero con el palillo para meter el cilindro (lo pegamos con agua).
Y este es el resultado:
CUPCAKE DE GATITO:
Para empezar, cogemos dos trocitos de fondant negro y hacemos dos bolitas una más grande para el cuerpo y otra más pequeña para la cabeza. Le damos un poco de forma y las pegamos con un poco de agua (1). Antes de pegarlas o despúes, hacemos dos agujeritos con cuidado con la esteca en la bolita que será la cara como podemos ver en la imagen (2) y le metemos dos bolitas de fondant blanco y pintamos con un rotulador comestible negro las pupilas (3). Para acabar, cogemos dos trocitos pequeños de fondant y hacemos una forma de triángulo que serán las orejas y las pegamos a la cabeza con un poco de agua y lo mismo con la cola, hacemos un cilindro (más finito por el extremo en el que finaliza y más ancho en el extermo que pegaremos al cuerpo).
Y este es el resultado:
CUPCAKE DE LÁPIDA:
Para empezar, cogemos un trocito de fondant blanco y lo tintamos con un poco de color negro (es muy difícil conseguir un color negro con los colorantes negros por eso yo suelo comprar fondant negro y para las cosas grises uso este colorante) (1). Hacemos una bolita (2), estiramos con un rodillo (dejando un grosor de un centímetro más o menos) y hacemos la forma de arco con la mitad de un cortador redondo (3) y lo demás lo cortamos con una esteca (4). A continuación pintamos con un rotulador comestible negro R.I.P (5) y le introducimos un palillo para poder clavarlo en nuestro cupcake. NOTA: este cupcake a parte de llevar crema de queso, le eché por encima galleta oreo picada (la parte negra de la galleta) para simular la tierra.
Y este es el resultado:
CUPCAKE DE BRUJA:
Para empezar, hacemos dos bolitas del mismo tamaño de fondant blanco y una de ellas las tintamos de rosa (1). Las estiramos con un rodillo y hacemos pequeños círculos que serán las medias de la brujita (2). Nos ayudamos de un corcho para pinchar dos palillos pequeños que serán las piernas e introducimos uno a uno cada circulo alternando el color (3). Para hacer los zapatos, cogemos dos bolitas del mismo tamaño de fondant negro (4), le damos la forma de un rectángulo y con ayuda de una esteca simulamos los zapatos de bruja (5). Lo siguiente es clavar cada zapato a uno de los palillos (6) y por último, hacemos la falda, yo cogí una bolita blanca de fondant para poder luego clavar ahí las piernas y la cubrí de un trocito de fondant rosa que estiré con un rodillo y le hice la forma de falda (7).
Clava las piernas a la bola blanca y déjalo secar para que no se caigan. Si cuando las clavas se te caen las piernas, ayúdate de cualquier objeto para mantenerlas.
Y este es el resultado:
CUPCAKE DE FANTASMA:
Para empezar, cogemos una bola de fondant blanco (1), la estiramos con un rodillo y cortamos con un cortador rendondo del tamaño que queramos (2). Por otro lado, del fondant que nos ha sobrado hacemos una bolita (3) en la que introduciremos un palillo (tenemos que dejarlo secar para que no se caiga) (4). Una vez seco, cubrimos la bolita con el fondant que estiramos al principio y le damos forma de fantasma. Y ya sólo queda ponerle los ojos, yo lo hice con dos chips de chocolate que las peque al fondant con un poco de agua.
Y este es el resultado:
CUPCAKE DE MOMIA:
Es curioso, al hacer los recortes me salió ¡¡una cara de un fantasma!! y no pude evitar echarle una foto para subirla :)
Cortamos un circulo del tamaño de la parte de arriba de nuestro cupcake que nos servirá para hacer los cortes de las vendas y dos círculos pequeños para los ojos (1) y (2). Le hacemos las pupilas con fondant teñido de verde y con un tamaño más pequeño y las pegamos con un poco de agua encima de los círculos blancos (3). Y por último, lo vamos pegando poco a poco de forma alterna (aquí no es necesario el agua ya que la crema hace de pegamento) (4).
Y este es el resultado:
¡¡Y esto es todo!! Espero que os haya gustado y que os sirva para hacer vuestros cupcakes de halloween.
Os escribo comiéndome uno...y es que están ¡¡¡¡terroríficamente buenos!!!!
¡¡FELIZ HALLOWEEN!! :D
